Pan: Viaje A Nunca Jamás (2015) - Review

Hoy he ido al cine a ver Pan: Viaje A Nunca Jamás, una de las películas que más esperaba de los estrenos de este año, en gran parte porque Peter Pan es uno de mis clásicos Disney favoritos. 

Además, tenía muchas ganas de ver cómo reconstruían Nunca Jamás y qué detalles podían aportar a la historia que ya conocemos y tanto queremos, ya que nos explica un poco los acontecimientos previos a la escrita por J. M. Barrie.

La película se centra en la llegada de Peter a Nunca Jamás y en la amistad que forja con el Capitán Garfio antes de convertirse en enemigos mortales, introduciéndonos a nuevos personajes como Barba Negra, pirata conocido por todos, pero que nunca habíamos relacionado con la historia de Peter Pan. 

La historia comienza con la madre de Peter Pan, Amanda Seyfried, dejándole en la puerta de un orfanato de Londres, donde crece hasta cumplir 12 años. Es entonces, en una noche de bombardeos, cuando Peter y sus compañeros son secuestrados por unos piratas en un barco volador y llegan a Nunca Jamás.

Allí les espera Barba Negra, que los utilizará como esclavos en las minas para que extraigan el escaso polvo de hada que queda en la isla.

Pronto descubrirán que Peter no es un niño corriente y que él será la clave para acabar con los malvados planes del pirata, interpretado por Hugh Jackman, que da un cambio radical para dar vida al personaje.

La película comenzó gustándome bastante, aunque he de decir que no me gustó que estuviese ambientada en la II Guerra Mundial, ya que la obra original fue escrita en 1904 y los hechos ocurridos en esta nueva versión, se supone que son anteriores a la misma.

A pesar de este y otros detalles que difieren con el clásico de Disney y la obra original, como que la princesa Tigrilla sea adulta, la película me enganchó al principio, pero llegó a un punto en que consiguió aburrirme y que dejase de interesarme por la trama y me fijase solo en los efectos visuales, ya que visualmente es una maravilla de colores y criaturas mágicas.

Por otro lado, los personajes me gustaron mucho, ya que el niño que han cogido para hacer de Peter Pan, Levi Miller, no me ha desagradado y los diseños de los nativos, sobre todo el de Rooney Mara como Tigrilla me han encantado.

Uno de mis personajes preferidos fue Garfio, interpretado por Garrett Hedlund, que le da un toque muy divertido al personaje y me gustaron mucho su relación con Peter y su romance con Tigrilla, que aporta un poco de vidilla a la peli.

Cara Delevingne como sirena es de lo mejor, si han leído mi blog alguna vez sabrán que me encanta Cara y que me encantan las sirenas, así que este ha sido un gran plus. Eso sí, ha habido un personaje que me ha decepcionado muchísimo y ese es el de Campanilla. ¿Cómo se les ocurre no ponerle cara y dejarla como una simple luz alada y con patas?

Como ya dije, la trama acabó aburriéndome y me pareció demasiado infantil. Además, hubo escenas que me sobraron bastante como el momento Dragon Ball, que ya sabrán de lo que hablo si ven la peli, jaja.

Me quedé con las ganas de ver por qué se pelearon Peter y Garfio para convertirse en enemigos mortales, ya que podría haber dado pie a una nueva versión de la historia original. A no ser que ya tengan pensada una peli en torno a esta pelea, que no sé si llegaré a ver.

Una cosa que sí me gustó fue la música, ya que incluyeron versiones de temazos rock de Nirvana y The Ramones, aunque me pareció algo extraño por dos motivos, las canciones no pegaban con la película y el tema quedó un poco inconexo, ya que empezó pareciendo un musical, pero después dejó el tema de las canciones olvidado, así que podrían haber explotado ese punto o pasar de las canciones directamente.

Me quedo con el clásico de Disney y con la versión en acción real de 2003, que en comparación con esta me gustó mucho más. Aunque de las versiones en acción real, el Peter Pan que más me ha gustado ha sido el Peter malvado de Once Upon A Time.

Nota: 6.5/10