miércoles, 1 de marzo de 2017

Moonlight (2016) | Review


Crudo y directo retrato de la realidad 

Tras el polémico final de la gala de los Oscar, dónde Moonlight le arrebató el galardón a mejor película a La La Land tras una equivocación con los sobres, no pude evitar llenarme de curiosidad y comprobar que realmente se merecía el premio.

Antes de la gala no tenía previsto verla, ya que yo no soy mucho de ver este tipo de películas y mucho menos de ver todas las ganadoras de cada año. De hecho, ayer comprobé que solo he visto 12 de las 89 ganadoras y 56 de todas las nominadas durante esos 89 años. El caso es que me entró la curiosidad y la vi anoche.


La trama sigue a un niño que crece un un ambiente tóxico y marginal durante distintas etapas de su vida, dividiendo la película en capítulos, cosa que me gustó mucho.

He de decir que tiene un ritmo bastante lento y que puede que muchos no aguanten, pero película está llena del actuaciones brillantes que no te dejarán desengancharte y no podrás evitar sentir por estos personajes, sobre todo por el protagonista, al que vemos crecer y descubrir cosas de sí mismo, observando cómo su entorno le afecta hasta convertirse en un adulto.

Muchos la están comparando con Boyhood, película que sorprendentemente también me gustó mucho, pero si bien ambas retratan diferentes puntos de una vida, Moonlight lo hace con una realidad brutal, siendo, como ya dije en el titular, uno de los mejores retratos de la realidad que he visto en una película.


Tiene saltos muy abruptos en el tiempo, lo que en ocasiones me hacía perder el hilo, ya que algunos personajes desaparecían de la tram, mientras que otros se quedaban sin explicar qué había pasado en medio, pero eso es secundario, ya que por algo el director habrá querido mostrárnosla así.

Al final me quedé con ganas de más y de seguir indagando en la vida de este personaje y descubrir qué le pasa después. Las últimas escenas de la película me parecieron geniales, aunque me faltó un momento pasional después de tanta tensión sexual no resuelta. Aunque, una vez más, vuelve a ser secundario y no resta valor a la película.

La película me gustó mucho y, después de verla entiendo que se llevase el Oscar, pero sigo pensando que La La Land se lo merecía más, no solo por el gran impacto que ha causado, sino porque tiene muchos más logros artísticos y en líneas generales, a mí personalmente me ha parecido una mejor película.

Nota: 8/10

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